El insomnio puede ser de tres tipos fundamentalmente:
Insomnio inicial: Consiste en la dificultad para conciliar el sueño, y puede estar provocado por un estado de hipervigilia, estrés, ansiedad, excesivo agotamiento, etc.
Insomnio terminal o despertar precoz: La persona se duerme sin dificultad, pero se despierta pronto, mucho antes de lo que sería conveniente para un adecuado descanso. Este tipo de insomnio es poco habitual y suele ocurrir cuando se abusa de los somníferos.
Desvelos o despertares frecuentes: La persona se despierta repetidamente durante el periodo de descanso, con lo que hay una ausencia casi completa de sueño, y el individuo no se recupera de su cansancio, ni físico ni psíquico, con interferencia en sus actividades normales. Este tipo de insomnio puede estar relacionado con un estado de ansiedad aguda o un trastorno depresivo oculto.
El tratamiento del insomnio con recursos fitoterapéuticos ha dado resultados muy satisfactorios, ya que estos productos no alteran la estructura o arquitectura normal del sueño, consiguiendo que el individuo recupere su función de sueño adecuadamente, y sin efectos rebote.
Las plantas medicinales ejercen un efecto terapéutico menos intenso y menos rápido que es resto de los medicamentos de síntesis, y por ello se recomienda empezar con ellas antes de llegar a medicamentos más potentes.
Indicado en los siguientes casos:
Insomnio.
Nerviosismo.
Ansiedad.
Ingredientes por cápsulas:
100 mg de valeriana.
75 mg de amapola de california.
75 mg de lúpulo.
50 mg de L-Triptófano.
25 mg de espino blanco.
Vitaminas B3, B2, B1, ácido fólico y B12.
Modo de empleo:
Tomar 2 cápsulas antes de acostarse.
Presentación:
Envase de 60 cápsulas.